K. Hepburn en La reina de África |
A
los ochenta años,
mi
abuela volvía a tener la carita pequeña de su adolescencia.
La
podía recoger en la palma de mi mano.
En
ese intervalo de sesenta años, su rostro cambió,
dilatándose en sonrisas y llantos.
Haciéndose
ancho.
Desplegando las velas del tiempo,
soportando
el viento de una vida huracanada
Tempestad de nieve - Turner |
que se sumía, a veces,
en
balsas sin aire, y sin rumbo, a merced del azar de las mareas.
En
lo más profundo de su ser seguía siendo ella.
Aunque
el salitre del aire
dibujase
en sus venas todos los disfraces del mundo;
de
doncella a corsario,
de
náufrago a amazona,
de
ruidos a silencios.
Tormenta de nieve, alud, inundación -William Turner |